En el avistamiento número..., qué sé yo! Me las he encontrado tantas veces que no quiero dejar pasar la ocasión de hoy para traeros esta imagen de las águilas que me han venido a ver. Me gustaría llegar a identificarlas, pero no he llegado a saber con seguridad su nombre, por eso no lo pongo. En una ocasión han volado casi a mi lado, a una veintena de metros, en vuelo rasante y a mi altura cuando circulaba en bici; y creo que nos hemos visto la cara muy de cerca. Yo, ayudado con el móvil, como hoy; con los prismáticos, con el teleobjetivo de mi cámara, o a simple vista en otras ocasiones; bueno, que sólo falta que nos presenten. Ellas por el rabillo del ojo, su vista no necesitará más para verme.
Me dicen que no se explican cómo puedo tener tanta suerte para poder ver a tanta fauna. Yo me río y alguna vez he contestado, según es el interlocutor, que como no llevo escopeta los animales no me temen.
Amigo o amiga que lees éste, para mi no es suerte, si no constancia; la de muchos años y muchas salidas ahí, observando casi el día a día de nuestro magnífico entorno.
Nota : he podido hacer unas cuantas fotos más, pero en ellas se aprecia mejor el lugar en donde se ha realizado el contacto y, entenderás, que no puedo mostrarlo.
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